Sean Bean ya no aceptará papeles en los que su personaje muera.
El actor británico Sean Bean, conocido por sus papeles en El Señor de los Anillos y Juego de Tronos, ha decidido dejar de actuar en lo que en realidad es más famoso: morir.
Conocemos a Sean Bean como Boromir de la primera película de la trilogía LOTR y como Ned Stark de la primera temporada de la serie Juego de Tronos, y en ambos casos su personaje terminó sin cabeza (literalmente en el caso de Ned Stark), pero a pesar de esos dos ejemplos más conocidos, Sean ha interpretado la muerte en su carrera un total de 21 veces, después de lo cual decidió decir: ¡basta!
Sean tuvo su primera muerte en el cine en 1986, en la película Caravaggio, donde su personaje fue el antagonista al que el protagonista le cortó el cuello. Después de eso, siguió con The Patriot Games de 1992, pasando por el desafortunado Boromir de 2001, hasta The Hitcher de 2007, y luego Ned Stark. Además de las películas, Sean ha muerto dos veces en videojuegos: The Elder Scrolls IV: Oblivion y el año pasado en Hitman 2. Además, Bean ha muerto en las siguientes películas: GoldenEye, Black Death, Red Riding: The Year of Our Lord 1974, Clarissa, Equilibrium, Don’t Say a Word, Ca$h, Scarlett, The Island, Far North y The Field.
Por supuesto, Bean seguramente continuará con su carrera, aunque ahora el hecho de que sus personajes ya no mueran podría ser una especie de spoiler para todas sus futuras películas.
Los próximos proyectos de Sean Bean incluyen la película Possessor y la serie de televisión World On Fire, así como la película animada Watch the Skies.
¿Cuál es tu opinión sobre esta decisión de Bean?